Llanto de la tierra madre.

AMERICA SUFRIDA

 

América, en tu frondosa y milenaria selva ancestral

lloró el guazubirá su pena más profunda,

cuando el indígena bravio regó con su sangre tu tierra

fecunda.

Y lloró el búfalo en el norte y lloró la vicuña

en el sur.

Y lloró el águila en el norte

y lloró el cóndor en el sur.

Cuando el conquiestador sediento de sangre

y poder se ganó monte adentro, desgarrando

la paz de los tibios nidales,

destrosando los sueños del nativo sereno,

mutilando las flores de esta América indígena,

esta América tan dolida y

tan sufrida que aún hoy, que aún hoy sigue llorando sangre.